Mantenimiento
de los muebles de cocina
Trucos para
mantener vivos los muebles de cocina
Los frentes con superficie mate se protegen con una laca
mate intensa especial. Esta laca confiere a los frentes un tacto especial que
se acerca mucho al de un frente de madera encerado. Esta laca posee una
estructura más áspera que una laca lisa.
Por eso los productos alimenticios y las sustancias con un alto contenido de colorantes, como café, mostaza, té, vino tinto o similares, pueden dejar en la lámina ligeras coloraciones permanentes si se secan en la misma. Si es posible elimine las suciedades de inmediato con mucha agua o una solución jabonosa diluida. Los restos de manchas, sobre todo salpicaduras y sedimentos de grasa, se pueden eliminar con una solución muy caliente del 30% de jabón blando y utilizando un cepillo de fregar o de mano (cepillo de uñas). ¡Ten cuidado: existe peligro de quemadura!
Elimina después los restos de la solución de limpieza con agua clara tibia y seque la superficie con un paño de cuero. Puede ser necesario que se tenga que repetir este procedimiento varias veces. En el caso de manchas muy resistentes también se pueden emplear limpiadores con un contenido de alcohol de como máximo 15 a 20 %.
Los frentes
de alto brillo se pueden limpiar con mucha facilidad, porque la superficie está
completamente sellada. Las suciedades adherentes se pueden eliminar sin ejercer
gran fuerza y sin aplicar productos químicos. Emplea sólo medios de limpieza
(paños, esponjas, etc.) muy limpios. Las suciedades minerales, como los granos
de arena o polvo, pueden producir rasguños en la superficie y por eso no se
deben emplear. Los productos de limpieza empleados, a ser posible paños de
algodón (no paños de microfibra), se tienen que lavar y enjuagar minuciosamente
antes de su empleo. Si se elimina en la superficie polvo mineral o metálico, se
tiene que enjuagar el producto de limpieza permanentemente para que las
partículas de polvo no dejen huellas en la superficie de alto brillo.
Se pueden producir huellas de uso microscópicas. Estas huellas de uso se notan más o menos en dependencia del color y la incidencia de la luz. Estas huellas de uso no representan una reducción del valor de uso, sino que no se pueden evitar a largo plazo al igual que en todas las superficies de alto brillo como en coches, cristales u otras superficies de muebles.
Se pueden producir huellas de uso microscópicas. Estas huellas de uso se notan más o menos en dependencia del color y la incidencia de la luz. Estas huellas de uso no representan una reducción del valor de uso, sino que no se pueden evitar a largo plazo al igual que en todas las superficies de alto brillo como en coches, cristales u otras superficies de muebles.